Mi meta principal siempre fue llegar a ser el mejor haciendo las cosas paso a paso. Por eso no tuve miedo de estudiar en la Universidad de Carolina del norte después de terminar la preparatoria.
Todos me decían que no eligiera dicha universidad porque no podría jugar a ese nivel. Dijeron que debería asistir a la Academia de la Fuerzas Aérea porque así tendría empleo al terminar los estudios. La gente tenia planes diversos para mi. Pero yo tenia el mio.
Siempre me he propuesto metas acorto plazo, me doy cuenta de que cada uno de esos pasos me llevaron al siguiente. Cuando me expulsaron del equipo en la preparatoria como correctivo, aprendí algo: Supe que jamás quería volverme a sentir asì de mal. De modo que me propuse comenzar de nuevo como novato.
En todo momento tenia en mente lo que quería llegar a ser, es decir, el tipo de jugador en que deseaba convertirme.
Cada pequeño triunfo me hizo ganar un poco de confianza. Esta confianza me permitió competir en North Carolina. todo es una cuestión de mentalidad. Solo me concentraba en el siguiente paso. Me propongo metas realistas y concentro toda mi atención en ellas. Pregunto, leo y escucho. No temo preguntar cualquier cosa a quien sea si no tengo las respuestas o el conocimiento que necesito. Mi intención es llegar lejos y por eso pido ayuda e instrucciones.
Nunca tomo en cuenta las consecuencias de fallar un tiro importante.
Si acepto cualquier reto siempre pienso que lograre el éxito. Jamas pienso en que sucederá si fracaso.
Me di cuenta de que si llegaba a lograr algo en la vida tenia que ser agresivo. se que el temor puede ser un obstáculo para algunas personas, pero para mi no es mas que una ilusión.
Cuando me enfrento a situaciones cruciales solo pienso en lo que trato de lograr.
Parece que hay obstáculos en el camino pero en realidad no existe. Lo que si existe es la oportunidad de hacer el mejor esfuerzo y obtener éxito.
Si resulta que mi mejor esfuerzo no es suficiente era porque tal vez no era lo mio. Tal vez no poseía muchas aptitudes. Eso no tiene nada de malo y tampoco hay que temer. El fracaso siempre me ha fortalecido para la siguiente prueba.
Mi consejo es que usted debe pensar positiva mente y encontrar fortaleza en el fracaso. En ocasiones el fracaso nos acerca a donde queremos llegar.
Acepto el fracaso. Todos fallamos en algo. Pero no puedo aceptar el que no se intenten las cosas.
La verdad es que el triunfo no importa mucho, siempre y cuando haga el mejor esfuerzo con todo su corazón y esforzándose al 110 por ciento.
Me fui a North Carolina porque me di cuenta de que muchos jugadores de Dean smith eran seleccionados por equipos de la NBA. La gente me decía que era mejor evitar el camino difícil, pero yo no estaba dispuesto a hacerlo.
Siempre he creído que si un uno se pone a trabajar, los resultados llegaran tarde o temprano.
El aceptar responsabilidades es parte del compromiso a que me refiero. Por supuesto que encontrara usted obstáculos o distracciones. Yo me he topado con ellos, a todos nos ha sucedido. Pero los obstáculos no tiene porque detenerle. Al toparse con un muro, no de la espalda considerándose derrotado. Arregleselas para escalarlo, para romperlo o camine alrededor para superarlo.
Yo recibí una gran lección con respecto a las distracciones durante el primer año que pase en North Carolina. Me descubrí buscando el momento de la jugada espectacular para impresionar; hacia trampa en los aspectos defensivos para lograr situaciones de rompimiento.
El entrenador Smith me llamo un día y me enseño dos filmes, uno del principio de mis año como novato y otro del comienzo de la segunda temporada. Eran totalmente opuestos. Estaba buscando caminos fáciles. Conservaba la garra y el deseo, pero había perdido la concentración. Usted tiene que ajustarse a su proyecto. Muchas personas trataran de hundirlo hasta su propio nivel de bajo desempeño cuando notan que no pueden hacer ciertas cosas. Pero la verdad es que muy pocos logran algo de valor tomando el camino fácil. La mayoría obtiene sus metas por medios honestos, planteándose metas y comprometiéndose a alcanzarlas.
En North Carolina me enseñaron algo en lo que creo fervientemente: si los objetivos se conciben y logran como equipo, las carreras individuales destacaran por si mismas.
El talento gana juegos, pero el trabajo en equipo y la inteligencia ganan campeonatos.
En realidad los principios básicos, permiten que todo funcione. No importa cuales sean sus actividades o metas; jamas podrá prescindir de lo básico si quieres ser el mejor. Hay mucha gente con grandes habilidades, pero al no saber como aplicarlas a una situación particular, ¿de que les sirven?.
En el instante que uno se aleja de lo básico, los cimientos de su juego, desempeño académico o empleo, se debilitan hasta derrumbar toda la estructura.
Dean Smith me enseño el juego. Me enseño la importancia de lo básico y como aplicarlo a mi capacidad individual. Por eso hizo de mi un jugador completo. Cuando llegue a la NBA y tuve que trabajar distintas facetas de mi juego, al tirar o al defender, contaba con los cimientos que me permitían trabajar y construir.
Usted debe monitorear lo básico constantemente porque, en realidad, lo único que se modifica es el grado de atención que usted le presta. Recuerde que, a fin de cuentas, las cuestiones básicas no cambiaran jamas.
Siempre he tratado de ser líder con el ejemplo. No trato de motivar a los demás hablando porque no creo que las palabras signifiquen tanto como las acciones. Se dice que una imagen vale mas que mil palabras. Así que trato de integrar una imagen de duro trabajo y disciplina.
Usted tiene que ganarse el respeto de quienes le rodean predicando con el ejemplo. Debe ser consistente con su actividad.
Un líder no puede inventar excusas.
Pienso que un líder es también una persona que ha tenido éxito en el pasado y que no teme llevar a los demás por el camino del triunfo en el futuro -alguien que tiene una visión a futuro, que puede anticipar lo que sucederá.
Pero usted, lector, no tiene que salir en televisión, entrenar un equipo de la NBA o dedicarse al deporte profesional para ser un líder en toda la extensión de la palabra. Cada hogar, negocio, barrio y familia necesita un líder real. Sobran personas que hablen pero falta quien predique con el ejemplo.

